SARS-CoV-2: El mismo origen de un virus que se diferencia de sus ancestros
Autor: Constanza Valdivia Rossel|
Inició un nuevo milenio, un nuevo siglo y también un nuevo brote de enfermedades sin precedentes, del que comenzaron a ser testigos los países orientales. Pandemias bacterianas, como la peste negra, y virales del tipo influenza, ya habían cobrado la vida de millones de personas alrededor del mundo, pero el siglo XXI traería consigo un virus totalmente desconocido para la medicina y la ciencia: los Coronavirus.
La agencia de capacitación AST Educación explica que los Coronavirus son una amplia familia que puede causar diversas afecciones, desde un resfriado común hasta enfermedades más graves, pudiendo afectar órganos respiratorios, gastrointestinales, hepáticos y sistema nervioso central de humanos, ganado, pájaros, murciélagos, ratones y otros animales salvajes.
La ciencia ha comprobado que las tres pandemias originadas a partir del tercer milenio son zoonóticos, lo que quiere decir que el virus es traspasado de los animales a los humanos y propagado de persona a persona. Claudio Uribe, médico del Servicio de Salud Estudiantil de la Universidad Tecnológica Metropolitana (SESAES UTEM), menciona que hay siete tipos de Coronavirus capaces de afectar a la humanidad, siendo algunos más agresivos que otros, como el Síndrome Respiratorio Severo Agudo (SARS), el Síndrome Respiratorio de Medio Oriente (MERS) y, el último, SARS-CoV-2 que provoca el COVID-19.
“A pesar de ser de la misma familia, las diferencias radican en el material genético que, aunque tengan bases comunes, poseen variaciones que permiten tener distintos serotipos de la misma familia de virus. Con ello, también hay diferencias a nivel de proteínas, principalmente en sus cápsulas, lo que les permite la adherencia a distintos tipos celulares, afectando y enfermando a distintos huéspedes, entre ellos al humano”, afirma Uribe.
Diferencias entre Coronavirus
Al igual que los humanos, los Coronavirus son una familia que, dependiendo de su tipo, posee una diversidad genotípica que los diferencia a uno de otros, ya sea por su agente de transmisión, tipo de contagio, sintomatología o letalidad, aunque todos los estudios coinciden en que sus huéspedes de origen son los murciélagos.
Como informa Telesur, esto se evidencia con las cifras que dejó el SARS, virus transmitido por el gato civeta a la población de Guangdong (China) el 2002, con más de 8 mil personas contagiadas – en siete meses – por las gotas medianas o grandes que pueden alcanzar los 90 metros al ser expulsadas por un portador al toser o estornudar, siempre y cuando se presentaran los síntomas. En tanto, el MERS, que se transmitió desde los camellos de Arabia Saudita en 2012, es el de más baja propagación de persona a persona, porque se transmite por contacto íntimo, constatando más de 2.500 casos en 8 años.
“A diferencia de los otros Coronavirus, que su tasa de transmisión es menor, el SARS-CoV-2 tiene una transmisibilidad mucho mayor en sentido persona a persona, lo que significa que pasar el virus de una persona a otra es sumamente fácil; además del hecho de que la persona puede transmitir el virus incluso desde antes de presentar síntomas y de su periodo de incubación”, asevera la enfermera de SESAES UTEM, Laura Vidal.
Otra diferencia entre los tres síndromes respiratorios es la tasa de letalidad. En los últimos días, hemos sido testigos de cifras impactantes en cuanto a personas que fallecen por contraer Covid-19; no obstante, el médico Claudio Uribe sostiene que la actual pandemia es la menos mortífera de sus antecesoras.
“El Coronavirus causante del Covid-19 es el que tiene una letalidad entre el 2% y 4%; mientras que el SARS y MERS promedian un 9.6% y 34.5%, respectivamente. La diferencia radica en la transmisibilidad del virus, ya que, al ser mucho más fácil la transmisión del SARS-CoV-2 persona a persona, ha logrado afectar a una gran cantidad de individuos a nivel mundial y con ello un gran número de fallecidos, pero en cuanto a porcentajes, es mucho menor respecto a los otros”, afirma Uribe.
Respecto a estos antecedentes, la agencia de capacitación AST Educación concluye que los Coronavirus son virus ARN y, como tales, mutan con mucha facilidad para adaptarse a diferentes hospederos. Mientras que el MERS afectó al Medio Oriente y es más letal, se transmitió mayoritariamente en hospitales por secreciones y procedimiento; el agente del SARS es más agresivo y, tal vez, este COVID-19 se parezca a éste último en su patogenicidad. Los Coronavirus son virus ARN y como tales mutan con mucha facilidad, lo que les facilita adaptarse a diferentes hospederos.
Futuro poco esperanzador para Chile
De acuerdo a lo que indica la Organización Mundial de la Salud (OMS), el uso de mascarilla, distanciamiento social y lavado de manos constante y prolongadamente son medidas fundamentales para reducir las probabilidades de contraer Covid-19. Sin embargo, el médico y la enfermera de SESAES UTEM no tienen un buen pronóstico de la situación en Chile, considerando el comportamiento colectivo y las decisiones de las autoridades sanitarias.
Claudio Uribe manifiesta que “desde el punto de vista médico, si la situación no se logra contener, no se ve un futuro muy favorable. A pesar de la implementación de cuarentena, la gente sigue saliendo y pidiendo permisos de libre manera, lo que lleva a que en verdad no se logre cumplir el objetivo de esta medida. Es necesario que la comunidad tome conciencia, no sirve que decreten cuarentena, pero que salgan todos los días”.
En tanto, Laura Vidal también es crítica con el actuar de la ciudadanía, pero también con las decisiones de la autoridad sanitaria desde su labor como profesional en la denominada ‘primera línea’. “Si en un principio, en el mes de marzo, las autoridades hubieran tomado las decisiones adecuadas, este panorama no sería tan terrible. También, si realizaran un seguimiento de los casos como corresponde, podríamos evitar que las cifras aumenten considerablemente día a día, porque, lo que visualizo desde mis funciones, el control sanitario ha sido, de verdad, casi nulo”.