“A modo introductorio, este programa de Aprendizaje y Servicio (A+S) permite a las instituciones del estado cumplir con el rol social que por ley les fue conferido. El producto final que se obtenga de este proceso, que inicia este semestre, generará un fruto que servirá al municipio como fuente de información valiosa orientada a la toma de decisiones en diferentes ámbitos del quehacer comunal”, indica Juan Toledo Ibarra, director de la Escuela de Geomensura de la Facultad de Ingeniería de la UTEM.

En específico, en esta actividad se encuentran trabajando el profesor Dustyn Opazo Oyarzún, junto a las/os estudiantes del curso de Geoinformación Aplicada, de la carrera de Ingeniería en Geomensura, quienes están ad-portas de titularse. Además, está la contraparte técnica representada por Romina Fuentes, quién es la encargada de la Unidad de Análisis y proyectos de la Dirección de Prevención y Seguridad de la Ilustre Municipalidad de Santiago; Mireya González Lagos, Coordinadora del Consejo Asesor Social Empresarial (CASE-VTTE); y Emilio Castro Navarro, de la Unidad de Mejoramiento Docente (UMD) de la VRAC.

“Este proyecto busca generar una metodología de estimación de la población flotante en la comuna de Santiago, con el objetivo de describir la población flotante en la comuna de Santiago 2023-2024, de modo focalizado en ciertos sectores estratégicos priorizados, en base a criterios de proyección de políticas públicas y necesidades de análisis criminológico”, indica el profesor Dustyn Opazo Albarrán.

Al respecto, Castro Navarro indica que “la metodología de Aprendizaje y Servicio es promovida por la Unidad de Mejoramiento Docente UTEM. En este contexto, dentro de la UMD yo soy el coordinador de las metodologías activas. Lo que yo destacaría de este proyecto en general, es que Santiago es una comuna que tiene mucho flujo diario de personas, es muy intensa en el día a día, entonces este tipo de proyectos ayudan a la municipalidad a tener una visión con respecto a cómo se mueve la comuna durante el día y permite tomar decisiones con respecto a esto”.

“Para las y los estudiantes representa sin lugar a duda un excelente momento para poner en práctica lo estudiado en la asignatura y demás ramos del plan de estudio. Es también un paso de entrada al ámbito laboral, lo que sin duda es muy positivo ya que siempre será mejor titularse con algo de cocimiento del entorno laboral”, agrega Toledo Ibarra.

Actualmente, respecto a este trabajo colaborativo, las y los actores se encuentran en la etapa de aplicación de la propuesta metodológica de caracterización y cuantificación de la población flotante. “Lo anterior se está desarrollando en algunos sitios de muestra, para determinar las potencialidades y restricciones de la metodología seleccionada, de manera conjunta, entre el curso y la municipalidad”, explica Opazo Albarrán.

La idea es dividir el trabajo en dos grandes etapas. La primera, que es la que se está desarrollando durante este semestre, consiste en la elaboración de la metodología antes mencionada, y la segunda en la aplicación de esta. La segunda etapa se desarrollaría en el año 2024, lo que marca una continuidad entre la universidad y la municipalidad de Santiago. “Cabe destacar que la carrera de Geomensura viene trabajando con este mismo socio comunitario desde el segundo semestre del año 2022”, enfatiza el docente Dustyn Opazo Albarrán.

Potenciando los programas A+S en la UTEM

“Estos programas enfrentan a las y los estudiantes a tener que entregar respuestas en tiempo y forma, lo que se deriva de una planificación elaborada entre el socio comunitario y el profesor de la asignatura. Por otra parte, por ser una actividad que debe enfrentarse con criterio colaborativo, representa para ellas/os un desafío importante y por consiguiente les permite desarrollar y potenciar habilidades blandas que hoy por hoy son esenciales y bien valoradas en el ámbito laboral”, comenta el académico Juan Toledo Ibarra.

Emilio Castro Navarro, agrega que “la importancia de esta metodología es que permite que las/os estudiantes se expongan a una situación o un entorno que es lo más cercano a lo que van a vivir en su vida laboral. Además, esta metodología ayuda mucho a potenciar la responsabilidad social de nuestra universidad y a completar la bidireccionalidad en la vinculación con el medio, debido a que las/os estudiantes, si bien es cierto entregan un servicio en el exterior, también reciben un plus en su formación profesional. Asimismo, el/la profesor también adquiere información respecto a cómo debe ajustar la formación de las/os chicos para que estén cada vez más preparados para el campo laboral”.

El docente, Opazo Albarrán realza que “la valoración que las y los estudiantes tienen de este enfoque metodológico es muy alta. Por lo mismo, la generación anterior evaluó, y se refirió en muy buenos términos al desarrollo de este trabajo. Tal fue el impacto, que la generación actual sólo esperaba poder realizar un trabajo similar que los acercara al mundo laboral, tal como lo hicieron sus compañeros anteriormente”.