Danny Lobos Calquin, académico Facultad de Construcción UTEM: «La evolución tecnológica es nuestra hoja de ruta»
Autor: pedro berho|
Eficiencia, sustentabilidad, medioambiente, durabilidad, consumo, mantención y financiamiento, son algunos de los factores que Danny Lobos Calquin -Doctor en Ingeniería- asegura como fundamentales en la incorporación de la tecnología a los procesos de la disciplina de la construcción.
Para el académico, quien dicta clases de pregrado en las carreras de Arquitectura, Ingeniería en Construcción e Ingeniería Civil en Obras Civiles de la UTEM, la tecnología es el nuevo paradigma del rubro constructivo, lo que ha significado un proceso de cambio y adaptación a las nuevas herramientas.
El investigador, especialista en simulación de desempeño y nuevas apps, asegura que las universidades juegan un rol fundamental ante el nuevo escenario y que la digitalización y modernización en la UTEM se puede encontrar tanto en el pre como en el postgrado.
¿Cómo ha evolucionado el rubro de la construcción en los últimos años y hacia dónde se encamina?
– El rubro de la construcción ha evolucionado hacia una digitalización y una modernización de procesos que -principalmente- ha sido motivada por el desarrollo de la transformación digital mundial que se está viviendo en los últimos años. Las tendencias de sustentabilidad también han exigido mejorar los estándares de edificación y las tecnologías digitales -tales como el BIM- han permitido apoyar todas esas transformaciones de la construcción hacia la eficiencia energética.
La evolución y el avance tecnológico va a continuar ganando territorio en los procesos constructivos, elevando más y más los estándares de calidad, los que hoy en día también han llegado a ser obligatorios para la edificación pública. De esta manera, en un futuro cercano, debemos entender que la evolución tecnológica es la hoja de ruta que tiene que seguir la construcción.
¿Por qué la tecnología -particularmente- se ha integrado de forma tan fuerte en la construcción?
– Principalmente, a partir de los requerimientos actuales de los propios usuarios, que son los mandantes que usan después las construcciones. Ha habido una mayor necesidad de que los edificios duren más, de que consuman menos energía, de que contaminen menos el medio ambiente, de que -en definitiva- la huella de carbono de hacer ese edificio y de mantenerlo en el tiempo sea lo más bajo posible, al mismo tiempo que sea financiable de acuerdo a las coyunturas económicas.
En este contexto, también los propietarios de las viviendas, por ejemplo, buscan que éstas consuman menos energía tanto en verano como en invierno, que duren más los materiales y que sean más ecológicas. Esas necesidades y requerimientos han hecho que la construcción deba adaptarse rápidamente al cambio de paradigma, integrando de forma rápida y eficaz la tecnología en los procesos.
¿Cómo las universidades pueden aportar en la actualización y avances tecnológicos para la construcción?
– La disciplina de la construcción se ha integrado en todo el proceso de modernidad desde un punto de vista de impulsar este cambio en nosotros. Desde la universidad se debe hacer que este cambio ocurra de una manera conjunta entre la academia y la industria, entre las casas de estudio y el medio.
Se debe contar con profesionales capacitados para formar estudiantes a partir de las nuevas metodologías, que consideren la adaptación al nuevo contexto y a las nuevas dinámicas. Esto se logra a través de investigación, vinculación y permanente actualización de los programas de estudio, los que deben estar a la vanguardia de los cambios globales.
¿Cómo la UTEM está respondiendo a estos desafíos?
– Desde la UTEM hemos impulsado el cambio de paradigma hacia lo tecnológico. Nos hemos esforzado por contar con un cuerpo académico del mejor nivel, demostrando que contamos con profesionales capaces de realizar investigaciones en el tema, quienes dominan y enseñan sobre los nuevos softwares y programas, de modo de capacitar a la gente para que dejen de usar los métodos tradicionales, los que están basados principalmente en metodologías analógicas.
Nuestra casa de estudios -principalmente en las carreras de Arquitectura, Ingeniería en Construcción e Ingeniería Civil en Obras Civiles- ha posicionado como un eje transversal la digitalización y el uso de herramientas 3D. Estas tecnologías facilitan el diseño de planos, simulaciones, cálculos de costos y medición del desempeño, entre otros factores.
De esta manera, la principal integración y aporte que nosotros hemos hecho desde la universidad, tanto en el área de pregrado como en el área de postgrado, tiene que ver con incorporar la tecnología y sus diferentes áreas en los procesos formativos.
De hecho, la UTEM cuenta con un magíster en tecnología y también un magíster de eficiencia energética y sustentabilidad, instancias académicas que enseñan herramientas de tipo digital, de modelamiento tridimensional, de simulación del comportamiento de las construcciones, con programas como Revit y Bentley, software de simulación como Green Building Studio e Insert 360.
Y en el caso de pregrado, ya estamos -en los últimos años- implementando el BIM en nuestras mallas académicas, usando Revit y Autodesk, haciendo cubicaciones y planos, además de la utilización de software de simulación para la representación del proceso de construcción.