UTEM participa en nueva sesión del Taller de Interculturalidad y Multiculturalismo
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La actividad titulada “Hablemos de Interculturalidad: Diversas voces, un espacio común”, tuvo como objetivo reunir a estudiantes y académicos en un proceso de autoformación que fomenta la reflexión, el diálogo y el encuentro en torno a la interculturalidad y el multiculturalismo.
Durante la jornada, la decana de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Comunicación, Julia Cerda, indicó que “respetar la diversidad es un principio clave del trabajo social. Los y las profesionales del área trabajan para fortalecer comunidades inclusivas, que reconozcan y valoren la diversidad étnica y cultural de la sociedad, considerando también las diferencias individuales, familiares, grupales y comunitarias”.
En su exposición, el Dr. Williamson partió revisando el debate entre Jürgen Habermas y Joseph Ratzinger sobre lo que realmente une al mundo. “Las bases de la culturalidad están en la construcción que surge del propio pueblo y de la comunidad. Más que un asunto de lenguas o de formas de expresión lingüística, se trata de algo más profundo. No hablo desde la antropología, pero considero que este principio de espiritualidad trasciende lo meramente lingüístico y también va más allá de la experiencia de un grupo particular de estudiante”, dijo.
Agregó que la interculturalidad implica reconocer que “aquello que las personas entienden como manifestaciones culturales son, en sí mismas, expresiones de cultura que integran espiritualidad y valores diversos, los cuales enriquecen la diversidad”.
Otro de los puntos centrales de su reflexión fue el lugar de la resistencia. “Las luchas indígenas son un ejemplo vivo: las banderas mapuches en las calles no solo representan un reclamo local, sino también nacional, cargado de historia, identidad y defensa de la naturaleza. Existen experiencias conjuntas entre comunidades mapuche y actores externos en torno a ríos, lagos y territorios, que muestran la complejidad de estas relaciones”, indicó.
Asimismo, planteó que, si bien el colonialismo puede analizarse desde lo cultural, visto desde las comunidades y los territorios la realidad se llena de matices: “Junto con la opresión, siempre está la resistencia”. Recordó que en el mundo rural esta resistencia se ha dado en un contexto de fuerte militarización y violencia que ha atravesado tanto a gobiernos conservadores como progresistas. “Los pueblos terminan siendo masacrados, aunque las narrativas políticas cambien”,
En otro pasaje, aludiendo a un libro trabajado junto a otros académicos, Williamson planteó el foco de la interculturalidad en Europa y Norteamérica, donde ésta se entiende como convivencia de múltiples culturas. “Pero la pregunta es: ¿conviven realmente, o simplemente coexisten sin diálogo profundo?”, dijo.
“A veces, las comunidades no logran convivir plenamente. Basta mirar algunos barrios en Estados Unidos: barrios judíos, árabes, italianos, chinos… todos separados, como si cada grupo quedara encapsulado en su propio espacio”, expresó.
Por esto mismo, insiste en la importancia de enseñar y construir espacios comunes, que sean regulados por leyes, normas y prácticas que permitan la vida en comunidad, tanto a nivel local como global. “La convivencia cotidiana y la comunicación intercultural no son solo deseables, son un derecho humano: el derecho a convivir y a vivir bien”, señala.
Y agrega que “la clave está en la convivencia y el diálogo entre identidades culturales en la comunidad. Eso es lo que construye sociedad. Lo vemos en distintas experiencias. En Nueva Zelanda con la biculturalidad, en Ecuador con proyectos que dialogaban entre culturas, o en Brasil con procesos de síntesis espiritual y cultural”.
Destacó el aporte del feminismo a este debate, en especial la interseccionalidad, que enriquece la comprensión de la vida cotidiana y los modos de producir conocimiento. “La biculturalidad, entonces, no puede verse solo como una relación entre dominantes y dominados, sino como un proceso vivo, con luchas, tensiones y aprendizajes. Hoy, la universidad y el Estado nos invitan a mirar más allá: hacia la interdisciplinariedad, la interculturalidad y la transculturalidad”, indicó.
En lo personal, dijo, estas reflexiones son parte de su manera de entender la interculturalidad: como un desafío, un derecho y, sobre todo, una oportunidad para construir comunidades más justas y abiertas.
Esta fue la cuarta sesión del ciclo de conversatorios, que comenzó en diciembre de 2024 con la presentación de la Dra. Gracia Clérico, académica de la Universidad Nacional del Litoral (Argentina). En las siguientes sesiones participaron el Dr. Óscar Vega, director del Departamento de Trabajo Social de la UTEM, y el Dr. Jaime González, doctor en Antropología.