Cada 25 de noviembre, Día Internacional de la Violencia contra la Mujer, marca una de las fechas importantes para nuestra comunidad universitaria, porque denota el esfuerzo colectivo hecho por todas y todos para mejorar las relaciones de género en la UTEM y para reflexionar en torno a la prevención de la violencia, la inclusión y la equidad.

En ese sentido, el Programa de Género y Equidad se dio a la tarea de generar espacios de conversación y reflexión comunitaria para conmemorar esta importante fecha. Con ese mandato, organizaron la Ruta Comunitaria por Campus, bajo el slogan «UTEM por la Igualdad y la No Violencia«.

Esta instancia itinerante, constó de tres fechas, una por cada campus respectivamente, donde participaron una gran cantidad de departamentos y unidades de la universidad, así como también organizaciones y centros de estudiantes, cumpliendo el carácter comunitario de este recorrido.

“Apostamos a desarrollar actividades que tengan un fuerte sentido de comunidad. Desde el origen y diseño de la Ruta Comunitaria por Campus, fue pensada y co-construida de manera participativa, realizando reuniones colaborativas previas con unidades claves y con estudiantes. En estos espacios, fuimos recogiendo intereses, necesidades y recursos propios de sus integrantes … Lo comunitario es una invitación a interpelarnos e implicarnos en las transformaciones culturales que buscamos impulsar en la UTEM” comentó la trabajadora social del Programa de Género UTEM, Macarena Jofré Valenzuela.

Por su parte, Alejandro Bustos Doussang, trabajador social del PGE, destaca también la creación de “espacios de confianza y seguridad que nos permitan entender que contamos con instancias formales de protección en caso de violencia de género, acoso sexual y/o discriminación arbitraria, pero también contamos con espacios reflexivos, formativos, informativos y que involucren a la comunidad en la comprensión del fenómeno con el que trabajamos, como también en habilitar espacios de acción en donde se centre el protagonismo en la comunidad que conforma la cultura de nuestra universidad”.

Al ser consultada por el balance de esta ruta, la directora del Programa de Género y Equidad, María Ormazabal Abusleme, comenta que “este 25N 2022 marca un hito muy importante porque fuimos capaces de levantar un trabajo colaborativo y articulado con todas las unidades de apoyo de nuestra institución así como con las IES del barrio universitario. Esta estrategia comunitaria creemos que generó un efecto multiplicador que nos motiva a replicar y continuar con estas iniciativas en lo sucesivo…Si bien el trabajo logístico previo fue arduo, mereció la pena por los resultados que pudimos constatar en las percepciones de todos y todas quienes participaron en los tres campus”.

Entre los departamentos y equipos de la UTEM que participaron se cuentan el Plan de Apoyo Estudiantil, el Programa PACE, la Unidad de Desarrollo Comunitario, el Servicio de Deportes, el Servicio Bienestar Estudiantil, el Servicio de Salud Estudiantil, el Centro de Familia y Comunidad, Dirección de Gestión y Desarrollo de Personas, el Servicio de Bienestar de Personal, la VTTE, el Programa InES de Género, Ingeniería 2030, el Despe, el Centro de Enseñanza Aprendizaje, el Programa de Sustentabilidad, el Programa de Comunicaciones y la Biblioteca Providencia.

Las y los estudiantes al centro de la comunidad

Uno de los grandes desafíos a los que se enfrenta la UTEM post pandemia, es recuperar el sentido comunitario de la Universidad, restablecer los vínculos entre los diferentes estamentos y regenerar una identidad institucional que nos ayude a mejorar las relaciones entre las personas.

En ese sentido, la participación del estudiantado es esencial, y en la Ruta Comunitaria el aporte estudiantil se hizo sentir.

Además de una amplia participación como usuarios de la ruta, desde el PGE indican que tuvieron un papel preponderante en la organización y difusión del evento. Entre las instituciones estudiantiles que participaron se encuentran el Cedis, Cearq, Ceicpryma, Icoc, estudiantes de Trabajo Social, el Taller Lanitas, Ceebiblio, Ceico, Sesegen, mapadres, ceci, ceigt, Ceapu, Cecad, Ceagro, Ceielectronica, Ceind, Ceibiotec, proyecto Cie, las vocalías de género, exdev, entre otras.

Para Catalina Valdenegro Soto, estudiante de la carrera de Ingeniería Civil en Computación, mención en Informática, esta ruta fue “una idea genial, porque se visibilizan muchas cosas…como el tema de perspectiva de género y las brechas…creo que es importante que se organicen actividades como esta, porque ayudan a generar conciencia y empatía, porque se puede conocer la historia de los demás”.

En esa misma tónica, la estudiante de la carrera de Ingeniería en Biotecnología, Catalina Marchant Hurtado, comenta que el 25N y sus temáticas “son cosas que no se hablan…entonces uno puede aprovechar esta instancia para reflexionar con otras personas e informarse sobre estos temas”.

Asimismo, siguiendo la línea que comenta Catalina, la actividad también sirvió para ahondar relaciones con otras comunidades, permitiendo el vínculo con ONGs, departamentos de otras universidades y entidades gubernamentales como la Red Barrio Universitario, donde participamos junto a la Universidad Diego Portales y la Universidad Alberto Hurtado, la Municipalidad de Santiago a través de su departamento de Igualdad; la Municipalidad de Providencia, desde su departamento de diversidad e inclusión, la Red de educadoras menstruales Cáliz Rojo y la ONG Tremendas.