Como reconocimiento a la labor realizada durante el segundo semestre de 2022, el Centro de Enseñanza y Aprendizaje (CEA) de la Vicerrectoría Académica UTEM entregó los certificados de constancia a las y los estudiantes tutores de distintas carreras de la universidad, quienes acompañaron, apoyaron y fortalecieron el proceso de aprendizaje de compañeras y compañeros de años inferiores.

Las tutorías académicas se implementaron en 2019 para las asignaturas denominadas “críticas” o de alta tasa de reprobación, como una instancia pedagógica voluntaria, basada en el aprendizaje por relación horizontal, donde las y los tutores transmiten sus estrategias de aprendizaje para la aprobación del ramo y, en consecuencia, encaminar la titulación oportuna.

“Las tutorías tienen una resonancia especial porque representa lo que hacemos las y los formadores de formadores. Estos/as jóvenes son profesores en una dimensión cercana por la horizontalidad de la conexión con la audiencia, conectándose con las otras personas en una relación altamente personal, porque les enseñan, les dan contención y contactan con sus expectativas”, afirmó la directora general de Docencia, Diana Veneros Ruíz-Tagle.

Por su parte, el vicerrector Académico, Juan Óscar Martínez Barajas, aseguró que “enaltecen la labor de la universidad porque se genera un acompañamiento a jóvenes que requieren y necesitan apoyo por diversos factores. Por ello, es propicio felicitar la labor cumplida por cada voluntario y voluntaria e insto a nuestra comunidad estudiantil a formar parte de esta iniciativa para fortalecer el proceso de aprendizaje”.

En la actividad, se exhibieron testimonios de estudiantes que estaban ampliamente agradecidos por la colaboración recibida por parte de las y los voluntarios tutores, principalmente, por los vínculos humanos estrechados y la posibilidad de un aprendizaje efectivo para continuar su paso por la UTEM según el plan de estudios.

Al respecto, la tutora Millaray Márquez Canales expresó satisfacción por ver a las y los compañeros avanzar en sus conocimientos, asegurando que “a pesar que es un tanto tedioso planificar y armar el contenido o conseguir una sala, es una muy linda experiencia, por lo que invito a que todas y todos sigan participando en esta iniciativa que es efectiva en cuanto a sus objetivos”.

También, el tutor Ignacio Osorio Rojas contó que “cuando llegué a la UTEM tenía una mala base y solo tuve el apoyo de mis compañeros de carrera para avanzar, experiencia que me motivó a traspasar mis estrategias a otras personas que llegan a la universidad tal como yo. Es cierto que uno puede terminar cansado y con menos tiempo para actividades académicas o personales, pero hay una retroalimentación que es gratificante”.