Gracias a su esfuerzo, dedicación y pasión por el judo, Kacidy Barra Velásquez asegura su participación en los Juegos Mundiales Universitarios 2025, tras obtener recientemente la medalla de plata en el campeonato nacional universitario de la disciplina.

El logro no sólo representa un éxito personal para la estudiante, sino que también es un hito para la UTEM, ya que es la primera vez que una deportista de la institución clasifica al evento más importante del deporte universitario.

Además, la delegación chilena también marcará un hecho relevante, ya que va a contar con la participación de 184 personas, incluyendo deportistas, entrenadores, oficiales, personal médico y de prensa. Dentro de este gran equipo, Kacidy Barra representa a la UTEM con orgullo y compromiso.

Además del reflejo del talento y disciplina de la joven que cursa Ingeniería Comercial, el hito permite dar cuenta de la dinámica con la que UTEM fomenta el deporte universitario y brinda oportunidades a sus estudiantes para destacar en diferentes disciplinas. En ese sentido, el logro de Kacidy Barra es un ejemplo inspirador para otros jóvenes deportistas que sueñan con competir a nivel internacional.

Los Juegos Mundiales Universitarios de 2025 se van a realizar en dos sedes: Alemania e Italia. En Alemania, el evento tendrá lugar en la región metropolitana de Rhine-Ruhr, con competiciones en ciudades como Bochum, Duisburg, Essen, Mülheim an der Ruhr, Hagen y Berlín. Se espera la participación de 8.500 atletas de más de 150 países, lo que reafirma la magnitud y prestigio de esta competencia en el ámbito universitario.

La clasificación de Kacidy Barra marca un momento histórico para el deporte en la UTEM. Conversamos con la estudiante sobre sus aprontes en la competencia deportiva internacional.

¿Cómo fue el proceso de clasificación a los Juegos Mundiales Universitarios y qué significó para ti obtener este logro?

– Clasificar a los Juegos Mundiales Universitarios no fue un proceso fácil, ya que tuve que competir en varios torneos clasificatorios donde participaban todas las universidades, por lo cual tenía que demostrar mi nivel de combate. Cada entrenamiento, cada sacrificio y cada caída en el tatami valieron la pena cuando finalmente obtuve mi clasificación.

El logro representa mucho más que una clasificación, es el resultado de años de esfuerzo, disciplina y pasión por el judo. Poder representar a mi universidad y a mi país en una competencia de este nivel es un orgullo enorme.

Además, es una oportunidad para enfrentarme a los mejores judocas universitarios del mundo, seguir creciendo como atleta y demostrar que todo el trabajo que estado haciendo en conjunto a mis entrenadores Jaime Cañas, Cristian Barra y mi familia.

¿Cuáles fueron los mayores desafíos que enfrentaste durante la clasificación y cómo los superaste?

– Uno de los mayores es la exigencia de mantener un rendimiento constante en cada competencia. Cada torneo clasificatorio era una oportunidad crucial para sumar puntos y demostrar mi nivel, lo que significaba que no podía permitirme un mal día. Para superar esto, trabajé en mi preparación física y técnica con entrenamientos intensivos, además de analizar a mis oponentes y ajustar mis estrategias en cada combate.

También enfrenté una gran presión mental. Saber que cada combate podía definir mi clasificación generaba nervios y ansiedad, especialmente en los torneos más importantes.

A pesar de estos desafíos, cada obstáculo me hizo más fuerte y me preparó mejor para afrontar los Juegos Mundiales Universitarios. Mi objetivo es seguir mejorando y dar lo mejor de mí en cada combate.

¿Cómo ha sido tu preparación y qué expectativas tienes para el evento en Alemania?

– Comencé este deporte cuando tenía 8 años y mi primera competencia fue a los 10, obteniendo mi primera medalla y desde ese momento me enamoré del judo, ya que me dio varias oportunidades de ser parte de la selección chilena y lo más importante para mí y mi familia que pude entrar a estudiar a la universidad, representando así a la Universidad Tecnológica Metropolitana en cada evento.

Mi preparación para los Juegos Mundiales Universitarios en Alemania ha sido intensa y exigente, pero también muy motivadora. Con mis entrenadores hemos enfocado mis entrenamientos en mejorar tanto mi condición física como mi estrategia de combate. Mi rutina incluye sesiones diarias de judo técnico y táctico, entrenamientos de fuerza y resistencia, así como trabajo en la parte mental, que es clave en una competencia de este nivel.

Mis expectativas para el evento en Alemania son altas. Sé que será una competencia de altísimo nivel, con los mejores judocas universitarios del mundo, pero me siento preparado para dar lo mejor de mí. Mi objetivo es dejar en alto el nombre de mi país y mi universidad, disfrutar cada combate y aprovechar esta experiencia para seguir creciendo como atleta. Sé que cada lucha en el tatami será una oportunidad para demostrar todo el esfuerzo y sacrificio que me ha llevado hasta aquí.

¿Qué apoyo has recibido de la UTEM y cuál consideras que ha sido el rol de la universidad en tu trayectoria deportiva?

– Ha sido un pilar fundamental en mi trayectoria deportiva, tanto en lo académico como en lo deportivo. Desde que comencé a competir, la universidad me ha brindado un apoyo constante que ha sido clave en mi desarrollo como atleta.

Uno de los mayores apoyos que he recibido es la flexibilidad para poder combinar mis estudios con el entrenamiento. Además, la universidad ha patrocinado mi participación en torneos y ha facilitado los recursos necesarios para los entrenamientos, lo cual ha sido esencial para poder competir a nivel nacional.

También, mi entrenador ha sido una parte integral del apoyo institucional, ya que siempre he contado con su orientación y con el respaldo logístico de la universidad para entrenar en sus instalaciones.

En resumen, el rol de la universidad en mi trayectoria ha sido crucial, no sólo brindándome las herramientas para competir, sino también ofreciéndome un entorno de apoyo, comprensión y motivación para equilibrar mis estudios y mi carrera deportiva. Sin su apoyo constante, no estaría donde estoy hoy.

¿Qué significa para ti representar a Chile y a la UTEM en un evento de esta magnitud?

– Representar a Chile y a la UTEM en un evento de esta magnitud, como los Juegos Mundiales Universitarios, es un honor y una enorme responsabilidad que me llena de orgullo. Para mí, es la oportunidad de mostrar todo el trabajo, sacrificio y dedicación que he puesto en el judo, no solo a nivel personal, sino también, por todos los que me han apoyado a lo largo del camino: mi familia, mis entrenadores y mi universidad.

¿Cuáles son tus próximos desafíos y metas en el judo, tanto a nivel universitario como profesional?

– Mis próximos desafíos en el judo incluyen seguir compitiendo, entrenando y expandir el judo en la universidad para que más gente se pueda incluir en este lindo deporte y que todo esfuerzo tiene su recompensa.

Además, quiero seguir perfeccionando mi técnica y mi estrategia en el tatami, así como fortalecer mi preparación física y mental. Otra meta importante para mí es poder compartir mis experiencias y conocimientos con futuras generaciones de judocas, ayudándolos a desarrollarse y alcanzar sus propios objetivos dentro de este hermoso deporte.